Cada vez son más las marcas que se esfuerzan por ver cambios reales en su forma de trabajar. Generar el mínimo número de impactos posibles es una preocupación en la mayoría de las industrias de envases. Por ello, marcas como Carlsberg Group o L’Oréal se encuentran en procesos de investigación, optando por incorporar materiales sostenibles en sus envases. Carlsberg estudia crear la primera botella de cerveza, hecha con papel. Así como L’Oréal está desarrollando un tubo de cartón para envasar sus cosméticos. Animamos a todas las empresas a sumarse a este tipo iniciativas para obtener un mejor ecosistema.